Alimento imprescindible en nuestra dieta diaria que se remonta a 14000 años antes de Cristo, podemos pensar que este alimento surge con el hombre, de ahí quizá el dicho de que todo niño viene con un pan bajo el brazo, pero la realidad, es que ese refrán dista mucho de relacionarse con la aparición del pan, ya que hace alusión, al nacimiento de los niños en la época antigua, donde las familias más pobres, veían en los nacimientos de sus hijos, dos manos más para trabajar, y llevar alimentos a sus casas, tema que se empezó a solventar en la revolución industrial con la regulación de los trabajos para menores.
Ahora bien, dicho esto nos damos cuenta de la importancia del pan en cualquier época como alimento base de las familias, si nos fijamos hasta lo asemejan al cuerpo de Jesucristo, ya que ese es el significado que se le da en la última cena, cuando lo comparte con sus discípulos.
Pues después de esta introducción a modo de «culturilla general», voy a describir un receta de pan rápida y sencilla que se realiza en poco más de una hora, y que es el deleite de quien lo prueba.
INGREDIENTES
500 gr. de harina de fuerza (puedes utilizar cualquier otra, como harina integral , harina de espelta, harina de trigo y espelta integral, la que te de la gana)
350 ml de agua
15 gr. de azúcar
10 gr. de sal
3 cucharadas soperas de aceite de oliva
6gr. de levadura en polvo, o de fermento, o 10gr. de levadura fresca
nueces
arándanos
PREPARACIÓN
Para realizar el pan primeramente, vamos a templar el agua y deshacemos en ella la levadura, ya que es fundamental este paso, para una buena integración de esta con los demás ingredientes.
Una vez tenemos bien integrada la levadura y el agua, vamos a mezclar esto con el aceite, el azúcar (que lo que hace es alimentar a la levadura y hacer que se incremente, para que el pan quede más esponjoso) y con unas cucharadas de la harina que vamos a mezclar, pero sin poner toda, guardamos un poco para el final.
Una vez lo tenemos bien mezclado, lo dejamos reposar 30 minutos.
Al cabo de ese tiempo, añadimos el resto de harina y la sal, y volvemos a mezclar amasando bien. Una vez hecho esto, volvemos a dejar reposar 30 minutos más.
Acabado el tiempo de este reposo, volcamos en un banco y amasamos otra vez como doblando la masa, y sacando el aire que ésta contiene, (ni que decir tiene, que has de poner un poco de harina en el banco para ya éste último amasado, porque la masa debe estar un poco pegajosa y si no se pegará).
nota: si la masa no está pegajosa un poco, algo no has hecho bien, este proceso es importante para la esponjosidad del pan.
Y siguiendo con la receta, una vez amasado, mezcla arándonos y las nueces, o bien simplemente puedes hacerlo sin ellas, quedando una hogaza de pan blanco.
Para finalizar y antes de meter al horno, dale la forma deseada, y hazle un corte arriba si lo has hecho en forma de hogaza, humedeciendo un poco la parte de arriba, y ya estaría listo para meter al horno y hornear.
HORNEAR
Cuando metamos al horno el pan, es importante untar de aceite la base donde lo pongas, y tapar con un cuenco de cristal para horno, ya que así el pan no pierde la humedad que le has dado y además saldrá crujiente, como recién comprado.
La temperatura normal es de 180 grados arriba y abajo unos 40 minutos, pero si es verdad que cada horno es un mundo, y eso si lo debes controlar, ya que por ejemplo, el mío tiene mucha potencia y tengo que apagar la parte de abajo casi al final porque sino se dora en exceso, pero claro, esto si lo vas a ir adecuando conforme vayas haciendo.
Y ya por último : VOILÀ
Un maravilloso pan crujiente, cargadito de buenas propiedades nutricionales como tienen los arándanos:
vitamina C
aliado contra infecciones urinarias
antioxidantes
fibra, entre otras
Y por supuesto las nueces:
aporta minerales como potasio, zinc, magnesio y fosfóro
vitamina B
proporcionan mucha energía
fuente de proteína, etc.
Deseando que elaboréis mucho pan casero, y degustéis un alimento básico pero que da tantas posibilidades, y está tan, tan, ricoooooo.